Canto a una Cubana by Miguel Gonzalez New York 1949

CANTO A LA MUJER CUBANA


I

Mujer cubana: el idioma
busca el contacto del rio,
y en embriaguez de bohio
con sus encajes te toma.
Canta un guajiro en la loma.
se cromatiza el boscaje,
la luna - siempre de viaje -
te besa desde una flor,
y para encerrar tu amor
la luz se torna en paisaje.

II

Tu origen tiene una historia
y tu historia tiene un ala.
Tu origen es una escala
donde se duerme la gloria.
Tu presencia en la memoria
del caracol y del trino.
En ti florece el destino,
el horizonte navega,
y en tus pupilas la entrega
del person en un camino.

III
Te exalta el tiempo . Tu frente
es un nidal de inquietudes,
y del arbol que sacudes
cae como un sol radiante.
Por ti la paz es frecuente
y jubiloso el quebranto,
en tu soledad el llanto
es desprendimiento y nube,
y por tu escencia se sube
hasta el golgota del canto.

VI

Es cosmica dimensio
tu figura se perfila,
y el verde , el blanco y el lila
intergran el corazon.
Por la desvertebracion
del alba, la tierra es lumbre,
tus ideas, muchedumbre,
tu nombre musica y llave,
y para saberte ave
para estatua es una cumbre....

V

Desde el silencio , la brisa
que se enreda en la boca,
por no marcharte te toca
solamente la sonrisa.
El paisaje que se irisa
mas alla de tus pestañas,
no comprende si lo engañas
o si es verdad que tu animas
el exodo de las rimas
y el parto de las montañas.

VI

Mas esa dulce y salubre
actitud de aire y de luna
que hay en ti , confirma una
predestinacion del Cobre.
Tu corazon - niño pobre-
unge , enamora y subraya
la humildad y se desmaya
en la afrimacion redonda
en el musgo de la fronda
y el souvenir de la playa.

VII

Mujer de azucar y sueño;
novia austral del horizonte,
raiz de batey y de monte,
ancla de un barco trigueño.
Tu sangre es como el empeño
del mar por asir la palma.
Es tu tristeza la calma que
del crepusculo brota
cuando nace una gaviota
en la epidermis del alma.

VIII

Raiz de batey y monte;
Luisa Perez de Zambrana;
Amalia , piña temprana
en el frutal de Agramonte,
Guarina , mango y sinsonte,
sueco de estrella y mamey,
epitalamica ley
que espiritualiza el agua
cancion en La Demajagua
y eternidad en Hatuey.

IX

Leonor, Mariana y Cambula
te ramifican la sombre,
y tu paisaje se alfrombra
con las sandalias de " Tula".
El sol se desarticula,
sonrie un viento mambi.
Ondas de azul frenesi
desdoblan una guitarra,
y en tus labios se desgarra
la evocacion de Marti.

Miguel Gonzalez

Circa 1949
New York