La Habana - Madrid 29 años de Exilio.

Hoy hace 29 años de mi partida de Cuba.

Final del poema
" La Partida del Pirata"
by Gabriel de la Concepcion
Valdes PLACIDO

Y la violenta partida
De aquesta manera manda :
¡ A la mar I á la mar, compañeros I
Que la tierra nos quiere tragar ;
No hay cuartel, preparad los aceros.
Hierro y fuego : ¡A la marl á la marl

No mas danzas, sangrientos horrores
Do quier lleve el fulmíneo cañon;
Tiemblen esos del mundo señores
Solo al ver mi fatal pabellón ;
De perfidias é injustos horrores
Nuestra nave nos puede librar,
[ A la mar I

Para estar en desgracia infinita.
Existir oprimido tal vez,

Y morir en la tierra maldita,
Vale mas ser el pasto de un pez.
¿Quién la vida en las ondas me quila
Sin la suya también arriesgar?

¡ A la mar I
Nuestra nave sus velas estienda
Aunque ruja el sonante aquilón.
De las nubes el rayo descienda.
Suba el Ponto á la etérea rejion,

Y nos lance con furia tremenda
Al averno. ¡Las anclas levar!

¡ A la mar I '
Dijo el Pirata, los demaá callaron,

Y ante su aspecto sosegado y grave
Los cables de las áncoras soltaran"




Poema de despedida de
Gertrudis de Avellaneda

¡Perla del mar! ¡Estrella de occidente!
¡Hermosa Cuba! Tu brillante cielo
la noche cubre con su opaco velo,
como cubre el dolor mi triste frente.

¡Voy a partir!… La chusma diligente,
para arrancarme del nativo suelo
las velas iza, y pronta a su desvelo
la brisa acude de tu zona ardiente.

¡Adiós, patria feliz, edén querido!
¡Doquier que el hado en su furor me impela,
tu dulce nombre halagará mi oído!

¡Adiós!… Ya cruje la turgente vela…
el ancla se alza… el buque, estremecido,
las olas corta y silencioso vuela.


Final de la poesia
El Niagara by Heredia

Sin patria, sin amores,
Sólo miro ante mí llanto y dolores!
¡Niágara poderoso!
¡Adiós! ¡adiós! Dentro de pocos años
Ya devorado habrá la tumba fría
A tu débil cantor. ¡Duren mis versos
Cual tu gloria inmortal! ¡Pueda piadoso
Viéndote algún viajero,
Dar un suspiro a la memoria mía!
Y al abismarse Febo en occidente,
Feliz yo vuele do el Señor me llama,
Y al escuchar los ecos de mi fama,
Alce en las nubes la radiosa frente.